viernes, 11 de noviembre de 2011

El Hígado y el bazo, sus transtornos


El hígado, conocido como "Yakrut" en Ayurveda, es el órgano interno más grande y uno de los más importantes. En sánscrito "Ya" significa circulación y "krut" se refiere a la acción. Yakrut es un importante centro de fuego,  es el asiento de la ira, el odio, la envidia y los celos. Estas emociones deben ser procesadas ​​y  metabolizadas por que si se  reprimen, se acumulan en los tejidos, y conducen a la enfermedad.  El ayurveda no separa las emociones de los órganos. No podemos separar el cuerpo de la mente y la mente de la conciencia.


Funciones del hígado y el bazo

El hígado funciona como una central química en el cuerpo, regula los niveles de la mayoría de las principales sustancias químicas en la sangre. Absorbe el oxígeno y los nutrientes de la sangre y regula sus niveles de glucosa y aminoácidos. Ayuda a catabolizar fármacos y varias toxinas y produce la bilis que elimina los desechos y ayuda a procesar las grasas en el intestino delgado.

El hígado realiza muchas funciones vitales para el cuerpo, incluyendo la producción de importantes proteínas para el plasma sanguíneo, como la albúmina (que regula el intercambio de agua entre la sangre y los tejidos), almacena vitaminas (que desempeñan un papel en el sistema inmunológico), produce factores de coagulación (que permiten que la sangre coagule cuando la pared de un vaso sanguíneo está dañado) y globina (un constituyente del oxígeno que transporta el pigmento de la hemoglobina). El hígado también sintetiza el colesterol y proteínas específicas que ayudan a transportar la grasa en el cuerpo.

Otra de las funciones del hígado es depositar la glucosa, que no es requerida de inmediato por las células del cuerpo, y almacenarla como glucógeno. Cuando el cuerpo necesita generar más energía y calor, el hígado (bajo el estímulo de las hormonas) convierte el glucógeno en glucosa y la libera en el torrente sanguíneo. Además, el hígado regula los niveles de aminoácidos en sangre. Cuando la sangre contiene un nivel demasiado elevado de aminoácidos, el hígado convierte alguno de ellos en glucosa, en proteínas, en otros aminoácidos, y también en urea, que llega a los riñones para su excreción por la orina. Junto con los riñones, el hígado actúa para limpiar la sangre de fármacos y toxinas.

El bazo conocido como "Pleeha" en ayurveda, es un órgano que controla la calidad de los glóbulos rojos en la sangre mediante la eliminación y destrucción de todos los glóbulos rojos viejos, anómalos o desgastados  que son enviados al hígado y ayuda a combatir las infecciones mediante la producción de algunos anticuerpos como los fagocitos y linfocitos.


Transtornos del Hígado y el bazo y su tratamiento

En la medicina ayurvédica el hígado junto con el bazo se consideran la sede de ranjaka pitta. La definición literal de pitta es bilis. Ranjaka pitta le da color a todos los tejidos, es responsable de la eritrogenesis, la creación de glóbulos rojos en la médula ósea, que se mezclan con rasa dhatu, el plasma. Por lo tanto, ranjaka pitta es responsable de dar color a la sangre. La función de ranjaka pitta en el hígado es la desintegración de la hemoglobina, su "trabajo" consiste en dar color a la orina, las heces y el sudor.Ranjaka pitta en el bazo destruye las bacterias y parásitos, y produce algunos glóbulos blancos (rasa dhatu), por lo que su trabajo es más de protección.

El hígado y el bazo han sido considerados como los órganos más importantes del cuerpo y sus desórdenes han sido ampliamente descritos en los textos originales ayurvédicos, que se cree tienen más de 5000 años de antigüedad. Aunque las causas pueden variar según las condiciones climáticas del país, sus trastornos se han descrito con etiologías comunes.

El desequilibrio de uno, dos o de los tres 'doshas' tiene efectos individuales en el hígado con síntomas variados. La alteración de Vata o Kapha afecta a Pitta alterando sus secreciones y provocando  la incapacidad para desempeñar sus funciones normales.
  • La disminución en la secreción de 'Pitta' (bilis) causa sensaciones de frío en el cuerpo y síntomas como la anorexia, dispepsia, pérdida de lustre, dolores generalizados, indigestión, escalofríos, pesadez, tristeza, palidez, pérdida de visión, ardor, apetito y sed.
  • Su incremento provoca ardores en el cuerpo y síntomas como insomnio, vértigo, desmayos, palidez en los ojos, la cara, la piel y la orina, blanqueamiento de las heces y aumento de la sed y la rabia.
Los factores responsables del desequilibrio de "Pitta", relacionados con diversos trastornos del hígado, son la infestación de lombrices (bacteriológicas y parasitarias) y la obstrucción de los conductos biliares. Pitta puede ser agravada también a través de la dieta y el estilo de vida. Como el abuso de alcohol, comer mucha carne roja, comer demasiado picante o grasa, tomar alimentos pesados,  la falta de sueño,  la excesiva exposición directa al sol y el tabaquismo.   El fallo hepático puede producirse como resultado de una hepatitis aguda, envenenamiento y cirrosis.

Dos signos comunes de enfermedad hepática son la dilatación y la ictericia. Según Charaka, todos los desórdenes hepáticos están asociados a síntomas como debilidad, anorexia, indigestión, retención de heces y orina, sed, vómitos, malestar, desvanecimientos, falta de energía, tos, disnea, fiebre leve, falta de digestión, aspecto demacrado, dolor en dedos y articulaciones, anemia, abdomen descolorido y rojizo, oscurecimiento de la piel, pulso débil, hemorragia, etc. 

El desorden habitual del bazo es su dilatación, como resultado de varias infecciones, incluyendo la fiebre tifoidea y la malaria, desórdenes en la sangre, anemia hemolítica, etc. Provocando síntomas como sensación de ardor en la región del bazo, estreñimiento, orina escasa o con sangre, dificultades respiratorias, tos crónica, pérdida del apetito, aletargamiento, debilidad, complexión pálida, anemia, incremento de la sed, vómitos, mal gusto, visión borrosa, leves mareos y pérdida de la conciencia. Todas estas causas que provocan la dilatación del bazo, también provocan los transtornos y la dilatación del hígado y tienen síntomas comunes.

Hasta ahora la medicina moderna no presenta una cura efectiva para los desórdenes del hígado y del bazo. El ayurveda no trata las enfermedades sintomáticamente, sus tratamientos van dirigidos a corregir los desequilibrios de los doshas, conservar el sistema biliar, tonificarlo  y prevenir infecciones.


Fuentes: Lavanya ayurveda & Kabir Mehta 

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