jueves, 3 de noviembre de 2011

Dra. Prachiti "Tener las manos sudorosas o frías afecta a lo que cocinamos"


Prachiti Kinikar-Patwardhan, doctora ayurvédica. Tengo 37 años. Nací en Bombay y vivo en Pune, donde tengo una clínica ayurvédica. También paso consulta en Japón, Australia y España, y enseño medicina ayurvédica. Estoy casada y tengo un hijo de 10 años. Abogo por la igualdad y estoy en contra de las castas. Soy hindú
Pasado el furor de la medicina alopática en la India, la gente ha vuelto a su medicina milenaria: el buen doctor de cabecera que sabe cuántas horas duermes, de qué color son tus heces y en qué lugar te duele del alma. El ayurveda es el sistema curativo natural más antiguo del mundo. Según estudios norteamericanos, sus procesos de desintoxicación y el reequilibrio mediante la dieta han reducido el colesterol y la ansiedad en enfermos cardiacos y han ayudado a personas con úlceras de estómago, asma, alergias respiratorias, afecciones de la piel, hepatitis, ansiedad e insomnio. Prachiti imparte cursos y visita a sus pacientes de Japón, Australia y España: Málaga, Santander y Barcelona.

Hija de médico? 
No, mi padre es banquero y mi madre ama de casa. Crecí muy protegida en una familia de clase adinerada. 
Entonces, ¿por qué le dio por la medicina tradicional india? 
Mi tío era un médico muy famoso en Pune y en la escuela siempre me preguntaban si era su hija, lo hacían con tal entusiasmo que desde muy niña decidí que quería ser como él. 
¿Médico ayurvédico? 
En la universidad, tras dos años comunes de ciencia, eliges entre medicina alopática, que era mi elección, o ayurvédica. En aquella época la medicina que más en serio se tomaba la sociedad era la occidental. 
¿Qué pasó? 
Conocí a un médico ayurvédico que me propuso que al salir de la universidad fuera a su clínica a observar y escuchar. Daba clases gratuitas, una mezcla de filosofía y práctica, me entusiasmó. 
¿Cuál es la filosofía del ayurveda? 
El hombre no es más que un pedazo del universo, vive, evoluciona y muere en él y como él. Las tres energías que hay en el universo, vata (aire), pitta (el fuego) y kaphna (tierra/ agua), funcionan en todo lo vivo. 
¿Entiende la energía del universo? 
Basta con observar: la energía solar, el fuego, responsable de todo lo que sea conversión, es la que hace madurar el fruto, y en su cuerpo es la responsable de que el alimento que ingiere llegue a todas sus células. 
¿Todos los cuerpos funcionan igual? 
Esas tres energías están en cada uno de nosotros en proporciones distintas, por lo tanto cada persona necesita su dieta. Cualquier desarreglo, una colitis, un dolor de huesos, tiene en cada persona un tratamiento. 
¿Y cuando nos ataca un virus? 
En cada uno actúan distinto. La medicina ayurvédica trata a la persona en su conjunto y es sobre todo una medicina preventiva. 
¿Se trata de una manera de vivir? 
Exacto. A diario debes alimentarte de esas cosas que son buenas para tu organismo según tu composición de vata, pitta y kaphna; debes aplicarte aceite y hacer una serie de ejercicios específicos para ti. En general hay que levantarse con el sol y cenar pronto para evitar el ama.
¿Ama?
Se podría definir como lo que se deriva de una mala digestión, lo que provoca toxicidad en el cuerpo y en la mente. 
¿En la mente? 
La buena o mala digestión no sólo depende del alimento que ingerimos, sino también de cómo lo ingerimos. Si comemos deprisa, ausentes y llenos de pensamientos negativos, produciremos ama,que acabará desajustando las funciones fisiológicas de nuestro cuerpo y produciéndonos alguna enfermedad. La ira puede ser tan perjudicial para nuestro hígado como el exceso de alcohol. 
Parece lógico. 
Según con qué energía manipulemos los alimentos tendrán un efecto u otro cuando los comamos. 
Mejor cocinar cantando. 
Los pensamientos negativos son energía y tienen la capacidad de cambiar la bioquímica de nuestra piel. Unas manos secas y frías o sudorosas y calientes tendrán efectos energéticos diferentes sobre los alimentos que cocinamos. 
Una idea sorprendente. 
Si empezamos a prestar atención a todas las señales que el cuerpo nos envía, comprobaremos que afectan a nuestro humor, conducta, gustos, percepción, talentos... A cada acontecimiento que se produce en la mente le corresponde uno en el cuerpo. 
¿La salud es una cuestión de energías? 
Sí, energías equilibradas a través de la alimentación, el yoga, la meditación, el masaje, el uso de las hierbas, la dieta, la desintoxicación y purificación, y el panchakarma. 
¿En qué consiste el panchakarma?
Es el método de rejuvenecimiento y desintoxicación más importante del ayurveda, y tradicionalmente incluye enemas y vómitos, pero en Occidente utilizamos técnicas de masaje con distintos aceites medicinales con hierbas. 
¿Los masajes tienen efectos curativos? Aumentan la circulación y remueven los desechos de los tejidos, mejorando su nutrición. Aplacan el insomnio y mejoran la vista. Rejuvenecen, relajan y vigorizan los músculos, las fibras, los tendones, los huesos y la piel. Estimulan el sistema inmunitario y afirman la autoestima. 
¿Un masaje incide en la autoestima? 
Investigaciones de importantes universidades muestran que existen interacciones entre la mente, el cerebro, y el cuerpo a nivel molecular y orgánico que influyen en la salud y la calidad de vida de los individuos. 
Somos un todo comunicado. 
Sí, y por tanto el masaje al ampliar la conciencia hacia el cuerpo incrementa la concentración y efectúa una limpieza emocional, liberando emociones bloqueadas. 
¿Atrincheradas en el cuerpo? 
... En forma de toxinas en el tejido conjuntivo, y a través del masaje con los aceites adecuados afloran. Mucha gente durante un masaje explota en un llanto incontenido y aparentemente sin motivo. Cuando ocurre eso yo me alegro mucho. 
¿? 
Tras ese desbloqueo emerge de dentro un sentimiento de felicidad. El equilibrio de cuerpo y mente es el secreto de la felicidad. 

Entrevista extraída de "La contra", La Vanguardia 

3 comentarios:

Mar Sueiro Bal dijo...

La Dra Prachiti , además de una gran persona es una profesora maravillosa y una profesional increíble. He estado este verano en Pune y la he tenido de profesora de mi segundo año de Ayurveda y no sólo me ha encantado sino que he aprendido muchísimo. Su marido y todos los médicos que nos dieron clase son todos geniales.

Monica vendrell dijo...

Hola Mar, dónde estudias Ayurveda?

Mar Sueiro Bal dijo...

Hola Mónica, estudié en la Escuela Internacional de Ayurveda de Barcelona el primer año , y este verano con el CEA de Granada me fuí a India a estudiar el segundo año.