sábado, 10 de diciembre de 2011

El yoga y su poder psicoterapéutico


El Yoga sostiene que el origen de todas nuestras enfermedades y de nuestros sufrimientos es el olvido de nuestra verdadera naturaleza cuya esencia es existencia, sabiduría y dicha infinitas. Debido a nuestra ignorancia nos hemos identificado con la mente y creemos que nuestros pensamientos, emociones y sentimientos somos nosotros cuando en realidad todos esos aspectos no son más que velos que nos impiden descubrir nuestra verdera esencia

Todos, en un momento u otro de nuestra vida, sentimos que nos falta algo, que debe haber una razón para estar aquí, que tiene que haber un propósito. Todos nosotros, de una forma u otra, estamos buscando recuperar esa conexión con nuestra fuente. Según el yoga podemos descubrir quienes somos en realidad mediante la cesación de las ondas mentales o vrittis. Cuando la mente se calma (satva) se convierte en un lago de aguas puras y tranquilas que permite que el fondo se vea con total claridad -el fondo sería, en esta analogía, nuestra verdadera naturaleza-, cuando la mente está agitada (rajas) el fondo se puede ver pero se nos manifiesta alterado debido al movimiento de las aguas, por último,  si la mente está llena de impurezas (tamas), el fondo aparece oculto, es como un lago lleno de barro.
El proceso curativo consiste en ir recuperando la consciencia de nuestra verdadera naturaleza, purificando nuestros pensamientos  y despertando en nosotros todo nuestro poder. Para ello hemos de partir del momento presente y  aceptar que somos responsables de todas las circunstancias de nuestra vida. Cuando culpamos a algo o a alguien por nuestra infelicidad o sufrimiento estamos asentando dos ideas que son totalmente erróneas:
1)    Nuestra felicidad o infelicidad, salud o enfermedad dependen de causas externas
2)    No tenemos el poder de cambiar nuestras circunstancias
La mente es un instrumento muy poderoso que puede ayudarnos a conocer nuestra verdadera naturaleza y sanarnos o puede destruirnos.  Depende de nosotros que aprendamos a dominarla o nos dejemos dominar por ella.
Hace miles de años el yoga ya estableció que la mente domina y modela el mundo físico, teoría que actualmente está siendo provada por la física cuántica. El cuerpo sigue a la mente e imita sus cambios, por ejemplo cuando nos concentramos, nuestros ojos permanecen inmóbiles, si estamos depresivos el cuerpo no puede funcionar adecuadamente. Cuanto más se alivia el aspecto mental de una enfermedad, más se logra aliviar su aspecto físico por ello me atrevería a sostener que la salud mental es más importante que la salud física. Si la mente está sana, el cuerpo estará necesariamente sano. 
Cada cambio en nuestro pensamiento produce una vibración que afecta al cuerpo físico. Está comprobado que el odio, los celos etc. generan una serie de cambios eléctricos y químicos en nuestras células que debilitan nuestra salud, de la misma forma los pensamientos positivos estimulan y fortalecen nuestro sistema inmunitario.



“ El hombre siembra un pensamiento y recoge una acción,
Siembra una acción y recoge un hábito,
Siembra un hábito y recoge un carácter,
Siembra un carácter y obtiene un destino”

Cambiar un hábito nocivo lleva su tiempo, por ello el proceso de sanación implica un compromiso muy profundo, ya que una vez que se inicia no se debe abandonar a pesar de los obstáculos o retrocesos aparentes, ya que los resultados serán muy beneficiosos y nos aportarán felicidad .El proceso terapéutico (sádhana) que sigo con las personas que presentan algún tipo de problema como puede ser la ansiedad, depresión, estrés, adicción, falta de autoestima etc  está basado en las teorías del Raya Yoga ( yoga mental) y el ayurveda (medicina tradicional India). 
Las sesiones duran 1:30h y en ellas trabajo los siguientes aspectos:
  • Analizar el estado de la persona en el momento presente e identificar sus hábitos erróneos. 
  • Establecer un programa de purificación mental y física, adaptado a las necesidades de la persona, mediante observancias, repetición y alimentación sana
  • Fortalecer su cuerpo físico e incrementar su energía vital mediante la práctica de asanas y pranayama
  • Desarrollar su poder de concentración, mediante la meditación y la visualización creativo
  • Creación de un diario como seguimiento de todo su proceso curativo
Los resultados son impresionantes, ya que la persona sufre una transformación total que va de dentro a fuera. Yo misma podría deciros que he vivenciado esa transformación en muchos aspectos de mi vida, uno de ellos fue cuando tenía 21 años y desarrollé una bulimia. Recuerdo que seguí tratamiento psicológico pero aún así no conseguía liberarme del impulso de vomitar después de haber comido compulsivamente, me sentía totalmente desesperada porque no podía liberarme de esa enfermedad y eso producía mucho dolor en mis padres.

Esto duró 2 años, hasta que inicié un sádhana yóguico. En un mes me liberé de la bulimia y en los años sucesivos nunca más volvi a tener una recaida, de eso hace ya casi 16 años.  Parece increíble que lo que no conseguí en 2 años lo conseguí en un mes gracias al yoga, pero esto no es un milagro esto es fruto del poder real que tienen las prácticas yóguicas para despertar nuestra capacidad de autocuración cuando se practican con perseverancia y regularidad. Personalmente creo que el yoga tendría que estudiarse en la universidad de psicología por la profundidad de sus conocimientos sobre la mente y por la efectividad de sus técnicas de control mental.

Autor: Monica Vendrell. 

Para contactar enviar e-mail:  monika@yogaterapeutico.org

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